27.7.16

Aquarina


Diluir la fantasía
para condensar la verdad,

la realidad
de un naufragio
sin saberme exactamente
si río
o mar,


hidrólisis que se prende
de mi éter,
de mi sol volátil de acuario.

Me conozco
y no,
siento todo
y no veo nada.

Sumergirse en lo turbio
de la vida,

sujetarse del ancla
de un buque de sueños,

dejarse llevar
desde la profundidad 
existencial,
a riendas del navío
de sutiles deseos.

Ser el agua del naufragio,
ser el tripulante
y la balsa
y la vela.

Natalia Peralta

23.7.16

No sé












No sé,
la lapicera me chista
pero no sé qué quiere hoy de mí;

los renglones me imploran,
me piden palabras,
pero no me dicen cuáles codician.

No sé,
hay poemas dando vueltas
incrustados en el éter,
son movedizos,
son huidizos.

No sé,
ángeles y demonios trovadores
algo me cantan
a través de las paredes.

La verdad
es que no sé nada
de los versos de los astros
y de cómo escribirlos;

mas las estrellas murmuran
y aunque no entiendo mucho
sus espirales de secretos
las bajo y las trazo.

Algo brilla en el papel
cual diamante,
mi mano como un prisma
transforma lo desconocido
en estrofas.

No sé,
y en la insensatez
se me hace agua la boca
de rapsodias inconclusas
y odas sempiternas.


Natalia Peralta 

22.7.16

Confluencia








Emociones encontradas.
Sí, mis emociones se encuentran
y a veces juegan,
otras veces riñen
y otras, las más bellas de las veces,
se aman.

Por estos días riñen y juegan;
yo, en mi inocencia,
intento disciplinarlas,
mas se revelan dentro de mí
porque quieren ser eximidas;
ellas habitan la tierra de mi ser
y aran con gracia.

Cuando mis emociones
se corresponden y se aman
fertilizan todo mi espíritu,
brotan rosas en mis mejillas
y las abejas de mis pensamientos
fabrican miel en mis ojos.

Me pueblan emociones
y en sus encuentros y desencuentros
prolifera mi libertad con soltura.


Natalia Peralta